lunes, 24 de agosto de 2009

Balanza Comercial en México: Julio 2009


INEGI dio a conocer las cifras de comercio exterior para julio. En realidad ninguna novedad manteniéndose las tendencias de hace ya varios meses. En el cuadro que se adjunta se resume la información, destacándose un aumento en el déficit comercial por un 5% respecto al mismo mes del año anterior, pero para el acumulado del año se mantiene una contracción de 33.3%, lo que refleja la contracción en nuestro comercio mundial en el 2009 (fenómeno casi generalizado en el resto del mundo).

En el segundo cuadro queda claro que nuestro principales motores de comercios externo, petróleo y productos automotrices son los que han sido particularmente golpeados. Sin embargo, hay que señalar que en el caso del petróleo, una parte importante corresponde a contracción en volumen que no es un problema de la crisis, sino de nuestra equivocada política petrolera en años pasados.
Algunos datos interesantes: el precio promedio del crudo mexicano en julio fue de 60.80 dólares por barril, nivel inferior en 2.83 dólares al de junio del presente año, y en 59.45 dólares respecto al de julio de 2008. En cuanto al volumen de crudo exportado, éste se ubicó en julio en 1.307 millones de barriles diarios (m.b.d.), un nivel superior al de 1.236 m.b.d. de junio pasado, pero menor al de 1.377 m.b.d. registrado en julio de 2008
Finalmente, la gráfica muestra la evolución desde 1992 de las exportaciones e importaciones a tasas de variación anual. Además de mostrar lo profundo de caída en esta crisis, destaca como ya lo he señalado en otras ocasiones, que a diferencia de la profunda crisis de 1995, en esta ocasión el carácter mundial del fenómeno se refleja en una caída de exportaciones, mientras que en 1995 sólo cayeron las importaciones, además del efecto de tipo de cambio en aquella ocasión.


1 comentario:

Antonio dijo...

En el periódico Reforma en la sección de Negocios mencionan con gusto la disminución de las importaciones en el agro mexicano, sin embargo al ver estos datos, podemos darnos cuenta de la insignificacia de las variaciones coyunturales en nuestro país, al lado de los grandes problemas estructurales que nos aquejan desde el siglo pasado. Ojala este periodo de cambio mundial traiga un cambio para las políticas en México.