jueves, 8 de marzo de 2012

¿En Serio Serían los Empresarios Mejores que los Políticos? Un argumento de Behavioral Economics

Slim declaró hace unos días que el país debería ser dirigido pro empresarios y no por políticos, porque los primeros serían mejores administradores ya que los políticos sólo piensan en ganar puestos etc etc etc.
Este es un tema que debería ser analizado con seriedad y profundidad... y no se mal interprete que yo intento defender a los políticos.... son indefendibles!!! pero ¿en serio los empresarios serían mejores?
En este espacio les comparto una reflexión basada en la Teoría Económica del comportamiento (BE) en donde se destaca que si bien tendemos a pensar en los grandes empresarios o empresas, estos no son la referencia pues la mayoría en realidad no son tan exitosos y no logran promover la innovación y el crecimiento...
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Firms with growth and energylike Apple and Nikehave found ways to make substantial and transformational market innovations. Most firms, however, fail to find and support big idea innovations. The result is a failure to generate new growth platforms, and a constant struggle to engage in "my brand is better than your brand" incremental innovation.
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Creo que Slim también sufre de "sobreconfianza", otro elemento de BE!!!!

2 comentarios:

Javier Adrián Guízar Montero dijo...

Además, si bien los políticos "tuercen" los incentivos de su puesto para adaptarlos a sus intereses personales, en el caso de los empresarios está bien claro que tienen un compromiso con sus negocios antes que con el bien común. Por lo menos a los políticos que incurren en estas prácticas se les tilda de corruptos pero ¿Quién puede criticar a los empresarios por hacerlo, si ése es su oficio? Está claro que siempre habría un conflicto de intereses con los empresarios dedicados a velar por "el bienestar de los mexicanos".

Anónimo dijo...

Inmediatamente después de ver su publicación, busqué las declaraciones de Carlos Slim. Éstas me parecen un poco atrevidas y considero necesario poner en tela de juicio cómo gente preparada para maximizar el beneficio de una empresa competitiva puede contribuir al bien común más allá de empleos, en un sector mínimo de la población, y buenos servicios.

Saludos, profesor.

Carolina Rivas