¿Por qué Ahorra la Gente?

Una nota informativa o lo que sería "educación económica". Espero sea útil

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La decisión de ahorrar para un individuo no se encuentra aislada y depende de la decisión de consumir. El ahorro sería un residual. El objetivo fundamental de un individuo es decidir cuál es su nivel óptimo de consumo que le garantice su mejor nivel de bienestar de acuerdo con los recursos con los que cuenta (es decir, su ingreso), y tratar que este nivel de consumo se mantenga relativamente estable a lo largo de su vida. En un modelo keynesiano este consumo depende fundamentalmente del ingreso con que cuente en cada momento dado un conjunto de factores psicológicos, sociales, institucionales, etc, que determinan sus patrones de consumo. En un modelo neoclásico, esta decisión es un poco más sofisticada ya que resulta de la selección de un patrón óptimo de consumo en el tiempo (decisión intertemporal) sujeta a una restricción presupuestal, que depende de mi ingreso en el tiempo y de los precios de los bienes que consumo, así como del costo de oportunidad de consumir algo hoy o mejor consumirlo mañana y ahorrar hoy.

En todo caso, en ambos modelos el ahorro es un residual! Es por eso que en la mayoría de los estudios que analizan el tema del ahorro de un individuo, el punto de partida es una función consumo y sus determinantes, ya que éstos indirectamente afectan al ahorro. En este sentido puedo decir que mi ahorro actual es un consumo futuro, pues esos recursos los utilizaré para consumir en el futuro. Otra forma de decirlo es que el ahorro es una trasferencia intertemporal (en el tiempo) de consumo presente a consumo futuro. En consecuencia, se deduce que este sería el principal motivo para ahorrar, esto es, dado los recursos con los que cuento (mi restricción presupuestal), cuál es mi patrón de consumo en el tiempo del que obtengo mayor satisfacción y, por lo tanto, cuánto me conviene consumir hoy y cuánto mañana, de tal forma que lo que no consuma hoy es mi ahorro que se convierte en el consumo de mañana. Desde luego que esta decisión está afectada por distintos factores como mi ingreso; mi riqueza; mis preferencias; mi actitud de precaución frente al riesgo; precios importantes, incluyendo a la tasa de interés; factores demográficos; mi acceso al sistema financiero; y otros más. Claramente el ahorro no es igual para cada individuo, grupo de gentes, o sociedades y mucho de la explicación se encuentra en cómo afectan estos factores.
Antes de conlcuir esta nota, una idea muy extendida es que el ahorro sólo lo realizan individuos con altos ingresos y que los pobres no pueden hacerlo. Esta idea es totalmente errónea y existe una amplia literatura que demuestra lo contrario. Las diferencias son de otro tipo y si bien el monto ahorrado es pequeño, la tasa de ahorro (el ahorro como proporción de su ingreso) de los pobres no necesariamente es igual a cero. Existe una cultura del ahorro transmitida por la familia y la sociedad, pero éste generalmente se ha venido realizando por canales informales y sólo hasta hace poco tiempo se han expandido las opciones formales para capturar estos recursos.