miércoles, 30 de octubre de 2013

La Reforma Fiscal: preguntas y respuestas (II)

Mi columna, Tintero Económico, que se publica hoy en el Universal

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Buenas tardes, profesor.

Estoy de acuerdo con usted con que la política deficitaria no implica que sea irresponsable siempre y cuando esté regida por un conjunto de reglas; como lo es en la reforma que se acaba de aprobar.

Sin embargo, no sé hasta qué punto la reforma sigue siendo una reforma hacendaria fiscal y no simples modificaciones al sistema de contribuciones.

En mi opinión, los ingresos no se despetrolizarán porque es un porcentaje demasiado alto del ingreso fiscal se basan en las rentas petroleras. Esto nos deja en un problema porque no sabemos hasta qué punto seguiremos contando con ese recurso tan preponderante para la economía mexicana.

Le mando saludos.

Danae Hernández Cortés.

Anónimo dijo...

DESAFORTUNADAMETE, CONSIDERO QUE NO CUENTO CON LAS HERRAMIENTAS NECESARIAS PARA PODER HACER UN ANALISIS CONCRETO DE LA POLÍTICA FISCAL QUE PROPUSO EL EJECUTIVO. PERO CONSIDERO MUY ACERTADA SU OPINIÓN. MUCHAS GRACIAS POR NUTRIR NUESTRAS ANSIAS ECONÓMICAS CON SU BLOG.
SALUDOS,
CESAR ENRIQUE URIBE ORTIZ.

Anónimo dijo...

Saludos cordiales, profesor:

Leí ambas columnas suyas acerca de este tema, ésta y la anterior, y considero que tal lectura sí me dilucidó el tema.

Quiero recalcar que asocié la información que usted expone, referente a la reforma fiscal, a los contenidos conceptuales y teóricos que hemos visto en clase, tales como:
El efecto “crowding out” que consiste en que, al aumentar el gasto del gobierno, disminuye la inversión del sector privado.
El ahorro, el consumo, y las expectativas futuras.
El aumento de la recaudación fiscal al aumentar impuestos a bienes cuya demanda es relativamente inelástica, particularmente, los “pecados”.

Ricardo Ramírez Vargas
Primer semestre

Anónimo dijo...

Ciertamente, los impuestos que buscan incentivar una disminución en el consumo de productos chatarra no serán exitosos porque el incremento de la tasa impositiva para estos productos es muy pequeño. Es decir, al incrementar la tasa marginalmente, los productores de sabritas no incrementarán sus precios hasta que pase un buen rato (podría ser hasta que termine el año), dependiendo de la elasticidad de la oferta y el aumnento de precios. con esto me refiero a que es tan chiquito este impuesto que implicaría subir el precio menos de 50 centavos, mientras que estos cambios son discretos. Por esta razón, me parece un simple artilugio recaudatorio.

Saludos,

Germán Villar

Anónimo dijo...

Me parece muy importante el tema de la despetrolización del ingreso; sin embargo, considero que la reforma no es lo suficientemente fuerte como para causar dicho efecto, ya que la dependencia del gobierno en el petróleo como fuente principal de ingreso es muy grande. Creo que es de suma importancia tratar de cambiar esto, ya que no es bueno depender tanto de este recurso. Además, una despetrolización implica que los recursos obtenidos por PEMEX podrían ser utilizados como inversión para mejorar PEMEX y no sólo para financiar el gasto público.

Jonas Yael López Niño

Anónimo dijo...

Veo más que optimista que se pretenda despetrolizar el gasto público mediante modificaciones marginales a la ley. Por ejemplo, este impuesto a los refrescos y comida chatarra (y tantos otros que fueron populares) que, evidentemente tienen fines recaudatorios , no podrían ni empezar a sustituir el tercio de ingresos que genera PEMEX. El ISR aumentó sólo en su último escalón, ¿no? Acaso un nuevo esquema de financiación con déficit intertemporal cero, como el que propone, podría tener consecuencias en la dirección de cumplir la meta.

Alejandro Sotelo
Quinto Semestre